ARVENSIS DESDE DENTRO

Bajo el punto de vista de este humilde fisiólogo vegetal

Esta área de conocimiento tiene, como principal objetivo, conocer cómo funciona la planta, cómo absorbe los nutrientes y de qué manera es capaz de distribuirlos por toda su estructura. ¿Cómo es posible que agua absorbida por minúsculas raíces acabe siendo transpirada por las hojas hasta a 80 metros de altura? Este es el caso del considerado el árbol más grande del mundo, el General Sherman, situado en el Sequoia National Park de California. Por algo se denomina científicamente a esta especie Sequoiadendron giganteum.

Este enigma, parcialmente dilucidado ante aquellos interesados por la teoría de la tensión-cohesión; junto con muchos otros, es lo que hace que la investigación sea fundamental en la nutrición vegetal. Necesitamos conocer cómo funciona la planta y de qué modo podemos facilitarle la absorción de los nutrientes, ya disponibles en el suelo, o aportados exógenamente. Fundamental resulta la aplicación del conocimiento científico en la idiosincrasia de nuestro día a día, para mejorar así la producción y evitar la tan temida – y con razón – contaminación.

En Arvensis

Aplicamos continuamente el desarrollo tecnológico y la innovación en nuestros productos. Llevamos a cabo colaboraciones con universidades, centros de investigación y empresas públicas y privadas, para sacarle a la tecnología el mayor partido.

La confianza es otro factor clave. El agricultor que compra productos Arvensis sabe, y lo sabe porque lo ve reflejado en sus plantas, que cada paso del proceso productivo está cuidado al detalle. El mimo en la fabricación es comparable al de la formulación en laboratorio. El hecho de exportar a más de 50 países no ha hecho más que fortalecer el cuidado que ponemos en la elaboración de cada uno de nuestros productos, para que lleguen al consumidor lo antes posible y con una altísima calidad.